En las estrategias empresariales se menciona a menudo el Inbound marketing o el Outbound marketing, pero ¿qué significan exactamente? ¿Y cuál funciona mejor como medio para hacer llegar nuestro mensaje? Lo más interesante de estos términos es que nos cuentan una historia, la de cómo ha cambiado el concepto de comunicación y marketing en función de los diferentes medios que han ido surgiendo a lo largo de los años. En la batalla entre Inbound Marketing VS Oubound marketing, ¿cuál es el ganador?
¿Qué es el Outbound Marketing?
Según Forbes, cada persona está expuesta a una media de entre 4000 y 10000 mensajes publicitarios al día. A través de un sinfín de canales: anuncios en televisión y radio, anuncios digitales en todas las páginas web y redes sociales que se visitan, vallas publicitarias en plena calle y en el interior de cafeterias y tiendas.
Esto es el Outbound Marketing, que se manifiesta a través de técnicas de marketing de «interrupción» capaces de llegar a un público muy amplio en una comunicación unidireccional. Esto incluye la publicidad impresa, televisiva y radiofónica, pero también la publicidad en las redes sociales, las llamadas en frío, el marketing por correo directo y otros métodos que se dirigen a un público bastante amplio.
Y es precisamente esta inmensidad la que constituye el verdadero problema. Para satisfacer el gusto de todos, Oubound Marketing tiene que utilizar mensajes genéricos, no personalizados y, en muchos casos, invasivos. Estas son las razones por las que, por ejemplo, el 91% de los usuarios se dan de baja de los correos electrónicos a los que han dado su consentimiento recientemente, porque no son relevantes para sus gustos y necesidades. O también, es lo que lleva al 84% de los jóvenes de 25 a 34 años a cerrar los sitios web que tienen mensajes intrusivos y molestos.
Este tipo de mensajes ya no tienen mucho seguimiento porque los consumidores tienen muchas opciones y formas de evitarlos y, además, saben que «pueden tener algo mejor». Más personalización, más opciones, más servicios. Con el inbound marketing.
¿Qué es el Inbound Marketing?
Mientras que el Outbound Marketing empuja su comunicación a todo el mundo, el Inbound Marketing atrae a los destinatarios de su mensaje personal. Como una especie de imán, en lugar de disparar en el montón, se dirige a aquellos que están buscando activamente nuestra solución en línea. Estos clientes potenciales acuden a nuestro sitio porque encuentran una ayuda real para sus problemas.
Para que todo esto funcione, por supuesto, debemos cuidar el contenido que transmite la oferta: la página web, el blog, cualquier guía descargable, todo aquello que pueda ofrecer un valor añadido a nuestro usuario. Si bien es cierto que este contenido no conduce inmediatamente a las ventas, si construye una credibilidad en torno a nuestra marca que nunca lograríamos sin este desarrollo de puntos de contacto con nuestro cliente ideal.
El Inbound Marketing es como un viaje: al principio, nuestros usuarios logran definir cuál es su problema y conocer las posibles soluciones; a mitad de camino intentan comparar diferentes soluciones; al final llegarán a la respuesta eligiendo la empresa que más les ha convencido.
Partiendo de la base de que la mayor parte de estos viajes (89% según Thinkwithgoogle) comienzan y tienen lugar online, establecer cuáles son las palabras clave de nuestra solución y optimizar nuestro contenido para ellas, nos permite no sólo conseguir buenos resultados en SEO, sino sobre todo convertirnos en esa respuesta a la necesidad.
¿Outbound Marketing o Inbound Marketing ?
Se tiene claro, por tanto, por qué tiene sentido preferir el Inbound marketing: poder enviar un mensaje diseñado exclusivamente para un tipo de persona es, en sí mismo, el punto ganador de un juego. Es como estar en medio de una multitud: si ya tenemos una idea clara en mente de cuál es nuestro cliente ideal, podemos acercarnos a él directamente en cuanto lo veamos aparecer; si no lo tenemos, no nos queda más remedio que decirle a todo el mundo en voz alta que tenemos un producto que quizá pueda ser útil.
Además, el inbound marketing elimina el problema de la molestia -que todo el mundo siente, incluso los que trabajan en esta- hacia la publicidad. La publicidad no es mala en sí misma, lo es si vende un producto que no nos interesa. Pero con el inbound marketing ya no hablamos de anuncios y notificaciones, sino de conversaciones y respuestas a necesidades.
El producto generalista, o la empresa con muchos recursos a su disposición, pueden ciertamente ver el Outbound marketing como una muy buena manera de ganar clientes. Piense en el comercio electrónico que vende ropa, o en los servicios que cubren un amplio público objetivo, como las aplicaciones genéricas. Ciertamente, no hay que demonizar el outbound, sobre todo porque responde a necesidades más amplias, pero el beneficio que algunas empresas obtienen de él no es el mismo que el que está prácticamente garantizado para todas las marcas que optan por el inbound.
Más aún si se tiene en cuenta que el Inbound Marketing es una actividad que cuesta un 62% menos que el Outbound: esto significa que el ahorro, puede invertirse en hacer que el Inbound sea aún más eficaz.
La metodología adecuada para el Inbound Marketing
Invertir en Inbound significa, en primer lugar, entender quién es nuestro buyer persona. ¿Quién es? ¿Qué busca? ¿Qué idioma prefiere, cuáles son sus intereses? Una vez que hayamos encontrado la forma de entender realmente a nuestro consumidor, debemos también medir los resultados de nuestra campaña, automatizando lo que podamos y centrándonos en los resultados.
¿Funciona? ¡Claro que sí! Según los últimos datos en este campo publicados por Financesonline, las estrategias de inbound marketing son estadísticamente más eficaces. En primer lugar entre las distintas metodologías, encontramos el marketing de contenidos, seguido de cerca por la AI y el Big Data. Estos son los tres primeros medios por los que podemos generar clientes potenciales y tráfico a nuestro sitio, pero también tener un alto ROI de las actividades de marketing.
Conclusiones
El Inbound marketing se basa en la personalización de nuestro mensaje, mientras que el Outbound se centra en nuestro producto. Aunque el mensaje personalizado acaba ganando esta carrera, hay que tener en cuenta que se trata de un negocio en constante cambio. Porque le habla a la gente y la gente… cambia. Por eso, con el Inbound también llega la necesidad de analizar los datos con más frecuencia para notar las diferencias en el mercado y hacer ajustes sobre la marcha. Porque no es seguro que lo que ha funcionado este año vaya a funcionar igual el próximo. Sea cual sea el ganador en nuestra batalla personal entre el Outbound Marketing o el Inbound Marketing, los pasos a seguir siempre estos tres: experimentar, medir, repetir.